Todo el tiempo queremos tener la razón y cuando vemos que alguien nos contradice nos ponemos a discutir hasta que uno de los dos gane o pierda, pero en realidad no hay ganador ni perdedor solamente es pura apariencia, porque en una discusión solo se lastiman ambas personas y se dejan llevar por la cólera y al final sólo se terminan arrepintiendo por lo que dijeron o hicieron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario